Me gustan las calles cuando están vacías.

Me gustan, por su silencio, por todo lo que no dicen que a la vez dice demasiado. Me gustan porque invitan a pensar, a sentirse en soledad.

Me gusta vagar por ellas, en las mañanas de domingo, en las noches, en las madrugadas, cuando no hay nadie. Mientras todos duermen.

Me gusta sentirlas, seguir pensando. Y aunque en soledad y a veces desánimo, termina por animarme. 

Los pensamientos vienen y van, algunos se quedan otros se esparcen. Pienso que quizás no sea tan triste ser una solitaria; pienso que en el fondo, me gusta, terminará por gustarme del todo.

Pienso, sigo pensando. Quiero soñar, he de soñar sola, he de volar, he de ayudar, seguir haciéndolo pese a seguir quedándome sola.

Nunca antes había examinado y aprendido a apreciar tanto estar a solas conmigo misma. Tal vez, no era el momento. Ahora puedo verlo distinto, ahora puedo sentirlo, saborearlo; aprender a aprovecharlo.

Me gustan las calles cuando están vacías, pasear con las manos en los bolsillos, no parar de caminar, el viento en la cara, el murmullo del silencio.

Me gustan las calles cuando están vacías, la luna, las estrellas.

La noche acaba de empezar; mi día sigue sin terminar. Volveré de nuevo, marcharé de nuevo. Subiendo y bajando, yendo y volviendo. A veces bien, a veces mal. A veces, nada.

Me gustan las calles cuando están vacías, me gusta pasear en silencio, me gusta respirar.

La inspiración se va, es demasiado temprano para pensar demasiado, para sentir demasiado.

¿Soñaré esta noche? Quién sabe...

Hoy no.

No, hoy no quiero pensar.
Mas... no puedo evitar que los pensamientos se agolpen dentro de mí, y luchen con toda su fuerza por salir a la luz.
Hoy es uno de esos días en que noto más cerca esa pizca de "fortaleza" que cada día he de ir acrecentando; hoy he pensado cuando te observaba comprar ese regalo, su regalo, para ella. Cuando te observo a ti y al resto; cuando compartís, cuando pensáis en esa otra persona. Me paro, reflexiono; ahora me observo a mi misma. ¿Qué siento?, pongo mi coraza y sigo adelante; aprendo, intento aprender a saber estar sola; no estoy mal, pero me queda mucho trabajo todavía. Estoy en ello.
Me sigo observando, miro adentro, siento; soy un poquito más fuerte, me lo trago, sigo adelante; reflexiono, siento quizá, la falta de "algo", pero se pasa pronto; al instante vuelvo a ser yo, esa yo que muestro al mundo, esa yo que vean los que no ven más allá.
Algo cambia, cuando eso sucede, me gusta estar sola, aislarme, encerrarme en la habitación, leer, ver algún documental, alguna película, escribir... seguir pensando. Un paso adelante; antes, no hubiese sido capaz de sentir así.
Miro a mi alrededor, hay silencio. Todos duermen, yo no puedo, o ¿no quiero?; a veces lo dudo.
Adoro la noche, adoro el escuchar los aullidos de los perrxs de camino a casa cuando salgo de trabajar; me alivia, me relaja; me paro por un instante en medio de la calle y los escucho con atención; son geniales, se escuchan a lo lejos, unos tras otros; sonrío, sigo caminando. Ya queda menos para llegar.
Debería dormir, pero pienso, no puedo evitarlo; es el final de mi día, un día que nunca termina, porque al momento he de comenzarlo de nuevo; y así, sucesivamente. Llego a las tres de la mañana, reflexiono, la cabeza no puede parar; intento dormir, ¡mierda! ya empieza un nuevo día, he de levantarme, volver a empezar. Nunca sé cuándo termina.
Pienso en ti, y en nadie. Pienso en mi, y en la nada. Decido no pensar por un momento. ¡Shh!, que las voces internas callen, tan solo unos minutos... tan solo.
La luna es creciente esta noche; comenzar, renacer, mirar hacia adelante, proyectos... evolucionar. Reflexiono de nuevo; mezclo conceptos, los uno, en conjunto la simbología con el estado de ánimo; sentimientos extraños.
No... parece que los sueños esta noche están cansados; no volaré esta noche, hoy no.

[Ursula H.Doll]

Alguien y nadie.

Y puedo cometer errores, y puedo caerme. Perder el sentido, dejar de ser coherente, aquí, allá, contigo, con nadie, con todxs.
Puedo meter la pata hasta el fondo o salir airosa, puedo reírme hasta reventar o llorar compulsivamente. Puedo tener ansiedad o estar serena.
Puedo beber hasta caerme en lo más profundo de mi alma, puedo hacer el idiota, pueden hablar de mi...
Pero puedo decir, que me he conocido, que me sigo conociendo, que no temo; no temo a los rincones más profundos de mi alma, no temo a toparme en la noche contra mi misma. Sé lo que hay cuando caigo, y sé lo que me espera cuando me levanto.
Aun me queda mucho que conocer, mucho por sorprenderme a mi misma. Es todo o nada. La suerte está echada, y ala vez, nada está dicho.
Estoy aprendiendo, si, quizás. El peor error, no es la inconsciencia, sino, no saber estar solxs. Es lo primero, lo básico, hay que intentarlo; paradójico, cuando a veces también me sobra el mundo; quiero creer, atisbos de ir aprendiendo.
No me importan las miradas, ni los gestos, ni las malas palabras. No me importa caerme; porque solo así se aprende. Culpable es el dolor, o mas bien... le doy las gracias, porque sin él, no sería quien soy; sin el, no sabría ser.
Puedo caerme, si, puedo ser otra, o ninguna.
Puedo ser, o no ser.
Alguien.. y nadie.

Ya no.

Se acabaron los sueños.

Las noches son para soñar

Dicen que las noches son para soñar, para caerse y volverse a levantar.
No sé porque la vida es tan perra, porque enseña tanto los dientes, porque muerde, dejando heridas de gran profundidad; sangrando... sin que tirita alguna valga; tan solo esperar, e ir sacando la costra poco a poco hasta acostumbrarse a ella. Porque nunca se va.
Sueño, cada día, cada noche; cada instante. Mas nunca llegas. Ojalá seas tu, dice una voz interior. Mientras sigo esperando.
El cielo estrellado, los litros de alcohol, las risas, las noches, los momentos. No me dejes. Mierda! Tan solo estás en mi mente; ¿por qué?. Ojalá fueses real, ojalá estuvieses aquí.
No quiero pensar, pero por desgracia, en mi estado, es cuando más pienso, cuando más saco de mi.
Dicen que las noches son para soñar; quizás sueñe demasiado; puede ser.
Quiero volar, pero tengo miedo a caer; pese a haber caído ya mil y una veces. Tengo miedo a sentir, a querer, a ver.... a saber.
No quiero temer. Mas temo.
No quiero saber.. no quiero. Pero a la vez... quiero, sé querer. Quererte.
Como un pequeño ángel de alas negras; como aquella que de paso se acerca a tu vida, te salva y desaparece dejándote solo en el recuerdo. Me recordarás.
Quiero que mis ojos decidan cuando empieza el día, quiero mirar el cielo, quiero ver el amanecer, contigo, no sé quién eres aun, pero me gustaría.
Déjame enseñarte, mi luna, mis estrellas, mi mundo, mi filosofía, ven por favor. No me dejes,acércate.
Las noches son para soñar, para caerse y volverse a levantar. Déjame soñar contigo, sueña conmigo; déjame caerme a tu lado, cae conmigo; déjame levantarme a tu lado, levántate conmigo.
Las noches son para soñar; pues... soñemos.

Confusión.. o algo.

Y ya no sé qué pensar, ni qué sentir.
No, no quiero creerme nada, no debo hacerlo. De lo contrario, sé que volveré a caer.
Me siento extraña ante algunos ¿sentimientos?, ya ni tan siquiera lo sé, quizá me cueste sentirme bien de nuevo, a gusto, quién sabe.
Intento cada día ser más fuerte, intento seguir adelante, sola, cada vez más sola; pero bien es cierto que no niego compartir con aquella persona que así lo desee. El camino es duro, y nadie ha dicho tampoco que fuese fácil. A veces, ni yo misma me comprendo.
Vivo al día, si, no pienso en un futuro, porque pienso que no existe, y el pasado... ya pasó. Vivir en el presente, saborear cada instante, cada momento, cada segundo...
Conocer, personas que vienen y van, que aportan, que no dan nada, y otras que dan mucho. Me gusta sentir, aunque sea contradictorio a mi estado actual, en el fondo, lo adoro. Adoro que me hagan sonreír, que me hagan sentir, palpitar... sentirme viva.
Si; que me roben momentos, segundos, abrazos, besos, miradas, caricias, palabras, lugares, conversaciones, todo y nada a la vez....
Y es que a veces, hasta parece que puedo volver a ilusionarme, que por mucho que no quiera sentir... ya ves.
Es mi problema, creo demasiado en el sentir, en las personas.. Creo en respirar, cerrar los ojos; en dejarse llevar; en arriesgarse. Nunca se sabe; y si te caes, te levantas. Y así una y otra vez. Cosas de la vida.
Aunque bien sé, que no de todas las vidas; pero me gusta que la mía sea así; aprendo más; sé apreciar cosas que otras personas ni por asomo, sabrían ver. Me gusta.
Ya no sé si estoy confusa, o algo así. No quiero, pero si a la vez. Sonrío y al tiempo me digo "¡ten cuidado!". Previsora supongo; pero no puedo evitar dejar que el destino me guíe de nuevo.
Tiempo al tiempo, sonreír, pensar y sobre todo luchar, seguir adelante.
Porque bien es cierto que no hemos de dejarnos nunca de lado.

Ursula HorrorDoll

Prueba superada.

Y finalmente puedo reírme en tu cara y devolverte con indiferencia todas esas estupideces que te dé por hacer.

Ya puedo decir que he llorado, pero también reído. Puedo decir que me ha dado absolutamente igual ver de cerca, que no ver, o que ver de lejos.

He podido darme cuenta de que mi vida, es mía. De que, si le pones empeño, puedes enfrentarte a casi, cualquier cosa (no me atrevo del todo, a decir "a cualquier cosa").

No me importan las malas lenguas, ni lo que los demás puedan pensar de mi. Siempre he dicho, sobre todo, de unos años hacía aquí; que quien me quiera conocer bien y quien no.... pues no merecerá la pena. De sobra sé que a no todo el mundo se le cae bien, o simplemente a veces "no caes". Es lógico. 

Puedo decir que a pesar de las resacas, y algún que otro mal trago. Este fin de semana, ha sido bastante productivo/constructivo. He aprendido muchas cosas, cosas que tenía por completo olvidadas. He recordado, he reído, he bailado... He decidido volver a ser yo. Y no nos entendamos mal; siempre he sido yo; pero hay veces en las que guardas una parte de ti, por los motivos que sean. Y he decidido, no guardarla más; sacarla a la luz, como antaño.

Me he ganado un catarrazo de la hostia, con su respectivo dolor de garganta y todo... pero ha merecido la pena. De hecho, repetiría.

No me importan las llamadas de números que no conozco, ni tampoco, las miradas de superioridad, esos aires, los detesto. 

Solo me importa vivir mi vida, a mi manera, el resto... me la suda.

Así que puedo decir... que... aunque por muy poquito... Prueba superada.

-FIN-

Transición mental, o algo así...

Y pasan los días, la forma en la que veo las cosas, ya no es la misma. Puede que caiga otra noche más, pero en cada caída, voy siendo más fuerte que la vez anterior, y que la anterior...

No necesito la aprobación de nadie, para ser yo. No necesito, ni me importan, las malas lenguas. Hoy solo pienso, que no he de dejar de ser yo misma.

Parece que empiezo a razonar, poco a poco; lo que no sé, si será, bueno ... o malo.

Se acerca el momento, se acercan de nuevo, noches por delante, noches por vivir, disfrutar; noches en las que sentir, en las que dejar de pensar...

Nadie ha dicho que el camino fuese fácil, nadie ha dicho que todo serían sonrisas y alegría. Espinas... quizá , a veces, demasiadas, pero poco a poco, pese a quedar en el alma a sangre y fuego (algunas), vas sabiendo convivir con ello. Ser fuerte, conseguir llegar hasta el punto, de que ya, casi ni te importen.

Sé que cuando duele nunca se olvida, pero a veces, todo depende del estado en el que te halles. De todo lo vivido.... del dolor; que al fin y al cabo, es lo que nos hace madurar.

Creo que hoy estoy demasiado serena para seguir escribiendo, creo que es cuando con menos claridad puedo hurgar en mis adentros y ser capaz de expresarme. No siempre es así, tan solo, a veces.

Lo estoy consiguiendo; ya casi nada duele. Ya puedo ser capaz de estar sola, incluso a veces, hasta me sobra el mundo.

Puedo recordar, sin soltar una lágrima; y aunque alguna recorra mis mejillas, soy capaz de ignorarlo y secar mi cara; seguir adelante, seguir trabajando, seguir quedando, seguir saliendo....

¿Cambio? ¿Transición?,  lo mismo, como lo quieras llamar. 

A veces siento como si doliese, pero a la vez, me siento vacía, ¿autodefensa?.. quién sabe...

Necesito caer otra noche, si, debe ser eso... 

Tal vez, sea, que se acerca un nuevo reto, una nueva prueba del destino, de la vida... Cada vez más fuerte. Pero sin olvidar tener corazón.

No quiero, no de nuevo, ni una sola vez más. Ni un segundo, ni un minuto.. Y a la vez.. Cada hora...

¿Me hiciste pensar?; al lo mejor... es algo así.

Definitivamente, hoy, no razono.

¡Mierda!, creo que te amé, y a veces dudo, si no te amo...

No... realmente desvarío. Creo que hoy... no razono.

Me falta el aire, los momentos, el argumento, la razón, los sentimientos, la verdad, pensar... distinguir.

Veneno que entra en mi alma, que me destroza por dentro y a la vez, me llena de fuerza, me hace seguir adelante, saber hasta donde puedo llegar, hasta donde puedo romperme; para levantarme, sola, por mi, sin nadie; sin ti.

Afuera llueve, ahora estoy dentro, recogida, al calor.. pero he estado ahí fuera. Al frío, mojándome, sintiendo, padeciendo, hablando; diciendo de todo, y a la vez nada.

He reído, casi llorado. He pensado, hablado, razonado...

Me han dicho que me echaban veinticuatro, el problema, el que siempre fue; no es lo mio, no soy así. Casi me voy sin pagar, pero por legal, me han visto, me han vigilado; acabé pagando.

La noche, otra más; mañana mejor, mañana con vosotrxs, con todxs. Más veneno, veneno en compañía, con cariño, con respeto, con cercanía.

No quiero pensar, y hoy, casi lo consigo.

No razono, quiero dormir; voy a dormir.

Es por la mañana, se asoman los primeros rallos de luz. Es mi momento... descansa... shh... no estoy.

No hay nadie.

Broken Souls

Y no te busco en las calles, ni en los momentos, ni en los instantes. No te busco en los gritos, ni en los murmullos, ni en los silencios...

No has sido nadie, ni quien, aunque por un instante te dejase serlo.

Llegar a través de los caminos más oscuros del alma, conocerse, atreverse...

Un teatro en el que intentas mover los hilos a tu antojo, mas son ellos los que te manejan a ti. Fortaleza, o el intento, calmar lágrimas para hacerse de hierro. Creerse fuerte, para acabar inmune a la sensibilidad. Ser sensible para acabar por rechazar el contacto, el aprecio; y a su vez, necesitarlo a gritos.

Vagar por las calles oscuras, a solas con la soledad, con los pensamientos, con las sonrisas y las lágrimas. Con los recuerdos.

No miro llamadas perdidas, no espero mensajes desconocidos, no espero encontrarte; no te busco.

Ya no creo, no te creo, ¿te creí?, tan solo me engañé, me ilusioné. Me dejé llevar.

Espero el paso del tiempo, tan solo creo en el presente. El pasado, queda atrás, sin pasar al olvido, pues se ha de avanzar aprendiendo, y el futuro... no existe. Cada minuto, cada segundo, cada hora, tan solo; en el momento exacto, ahora, en este instante; presente.

Los párpados intentan cerrarse ya, la fuerza puede; siguen abiertos, no decaen, lo intentan; no pueden.

Un día más, otra noche a las espaldas, vivencias, momentos, recuerdos, malos tragos; dulces y amargos. Veneno corriendo por las venas, olvido; rencor, rabia. Pasado. Aprecio, cariño, melancolía, realidad. Y al final, realista. 

Soñar, realidad distorsionada, o quizás sea mi alma la que así se encuentre. No lo sé.

Lunas, Soles, Estrellas. Azul.

La mirada, las miradas, tu mirada, mi mirada; nuestras miradas. Más que mil palabras, más que mil gestos. Hablar sin decir nada.

Y el telón sigue sin cerrarse, aunque a veces, esté a medio cerrar; persiste, el teatro sigue.... 

Almas rotas... 

Hoy me sobra el mundo

Y despertar sin querer abrir los ojos , sin querer ver la luz del día; anhelando la noche. Que vuelva otra vez, quiero caer de nuevo, quiero no sentir,tan solo, un instante más.

Parece que cae la noche de nuevo, esta será diferente, hoy no se cae, hoy hay que pensar, que plantar cara a los recuerdos agolpados en el rincón del olvido.

Me mece, por veces, la locura, otras , la cordura parece asomarse, pero no me gusta tanto.

He tenido que caerme mil y una veces y volver a levantarme, sin que nadie tienda la mano; que no es el mismo caer que el "caer" de las noches, de cada noche, de mis noches.

Hoy vuelve a no haber estrellas en el cielo, la luna, está casi llena. No quiero pensar, no, que no vengan a mi, que tan solo siga sonando la música...

Ojos cansados de ver, de sentir; que tan solo me envuelva la locura, la música, la noche, la nada, todxs esxs que no son, no hay nadie.

Hoy me sobra el mundo, hoy me acompaña soledad en mi recorrido interior, con las manos en los bolsillos y sin destino fijo.

Gritar, danzar, indiferencia, dolor, alma, segundos, instantes, momentos...

Nada se me ocurre ya.

Sigue sonando, no ceses nunca, no para.... una y otra vez, suena, suena , suena...

Errores Nostálgicos

Y si, cuando de nuevo topas con la soledad, cuando vuelve el tiempo de silencios, de pensamientos... Puede que sienta que te echo de menos.
Me cuesta comprender, comprenderme. Sentir, padecer, volver a sentir y volver a padecer. Mirar alrededor y tan solo observar, los árboles, los edificios, las luces, los coches, la gente, el cielo, la luna... No hay estrellas hoy. Me perderé en la noche, me dejaré guiar por lo más profundo de mi subconsciente; reiré, lloraré, pensaré, caeré, danzar y danzar al son del olvido...
La mente en blanco, tan solo el ruido. Ya estoy a salvo. Que las noches no terminen jamás. Viviré el presente y dejaré atrás todos esos errores, por los cuales, a veces, no puedo evitar sentir nostalgia.

Ursula H.Doll